El baby ballet es una práctica que hoy está en auge, ya que presenta muchos beneficios para los y las más pequeños. Esta actividad consiste en clases de baile que promueven la estimulación de los procesos motrices y corporales en la primera infancia.
El baile a temprana edad también promueve la salud sicológica y la madurez. A través del movimiento creativo, los niños y niñas pueden expresar sus emociones y tomar conciencia de sí mismos, Josefa ensaya desde los 3 años, 5 meses en Casa León, una academia regional. Pamela, su feliz mamita nos comenta que a Josefa desde muy pequeña le gustó bailar, miraba a las bailarinas en la TV y Youtube; después de un largo período de cuarentena, buscaron una actividad extraescolar para que se entretuviera y ella eligió ballet, porque quería bailar en puntitas de pie. Lo que más le gusta es ir a los ensayos, ponerse su traje y zapatillas de ballet para reunirse con sus amigas de «bailet» (le cuesta pronunciar «ballet»).
A sus cortos 3 años ha logrado concentrarse y hacer todos los ejercicios y seguir las instrucciones; está comprobado que el contacto con la danza contribuye a un desarrollo sano y gratificante de las distintas capacidades de los niños y niñas, así como promueven los beneficios de la estimulación corporal, la creatividad, imaginación, equilibrio, control de su cuerpo, reflejos, control espacial, etc., según especialistas.
En la última semana de noviembre se presentará en la gala de su academia, dónde interpretará un cuadro del Cascanueces, una pieza icónica del ballet. Le deseamos todo el éxito del mundo a nuestra #MiniTalentoJHB